Proseguimos examinando modelos de las mejores fabricantes
Tras entender intensamente todos y cada uno de los datos del lujoso Hyundai Genesis, llega le instante de ponerse en marcha y revisar sus características activas. El buque insignia de Hyundai está animado por un motor V6 de 315 CV ¿Va a estar a la altura de sus oponentes premium?
Llegamos a la última una parte de nuestro contacto con el lujoso
Hyundai Genesis sedán. Verificamos las características activas del buque insignia
de la marca coreana en un camino de sobra de 300 km que experimentamos
tras el volante y, naturalmente, asimismo en las plazas traseras.
Accionar
Bajo el capó del Genesis se oculta un motor 3.8 V6 Lambda
II GDi que genera 315 CV a 6.000 rpm y 397 Nm de par máximo a 5.000 rpm. La
distribución de capacidad luce por su progresividad en todo instante, aun con
el acelerador pisado intensamente. Hace más rápido de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos pero
solamente nos ofrecemos cuenta hasta el momento en que observamos la aguja del velocímetro subir de
forma insuperable.

El Genesis es el primer modelo de Hyundai con la tracción total HTRAC
En estos instantes de mayor exigencia el motor de seis
tubos exhibe un sonido satisfactorio, siendo la única situación en el que
se puede percibir levemente en tanto que la insonorización del habitáculo nos aísla
a la perfección del estruendos exterior. Hasta unos 100 km/h no se escucha solamente nada y a
partir de aquí se comienza a ver levemente el estruendos aerodinámico.
El motor de seis tubos está relacionado a una transmisión
automática de ocho velocidades. Hyundai la define técnicamente como “convertidor de par de turbina, estructura de
aluminio de alta resistencia, sensores y cableado integrados y una composición
de la válvula de solenoide de control directo”. La caja de cambios
automática actúa con mucha suavidad, las transiciones entre marchas se generan de forma prácticamente indetectable. La transmisión asimismo deja un manejo
secuencial mediante la palanca o unas pequeñas levas tras el aro del
volante.
En vías veloces se expone como un increíble viajero.
Aplomado, discreto y con unas suspensiones que filtran cualquier
irregularidad del asfalto para mimar a los ocupantes con un confort de marcha
intachable. Este cómodo tarado no compromete la seguridad del Genesis, que
aun exhibe alguna agilidad en zonas reviradas.

Cuero, madera y aluminio visten el interior
El emblema alado del Genesis reina en el capó
El truco está en el empleo de una suspensión neumática
electrónica (ECS) que sostiene la carrocería siempre y en todo momento nivelada. Naturalmente no
es un deportivo y su tamaño y peso se dejan ver pero, aún de esta forma, se tienen la posibilidad de
linkear curvas con velocidad sin que los movimientos de la carrocería sean muy acusados y aportando mucha
seguridad al conductor en todo instante.
Al hilo de ir veloz en tramos revirados vale la pena
charlar de la dirección eléctrica, con un guiado muy exacto y un nivel de
asistencia que resulta muy acertado. La dirección utiliza un sistema llamado R-MDPS
que, según Hyundai, disminuye el consumo de comburente un 2,9% en comparación con
los sistemas de dirección asistida hidráulicos habituales.

Los faros HID adaptativos son de serie
El sistema de tracción total capaz HTRAC contribuye un
agregado de seguridad en asfalto húmedo o helado. Distribuye el par de forma
automática entre los 2 ejes, actuando sobre las ruedas traseras en condiciones normales
hasta el momento en que descubre una pérdida de adherencia.
Hay tres métodos de conducción: Eco, Habitual y Sport. Como
curiosidad, el modo perfecto Sport se encontraba traducido en el sistema de infoentretenimiento
como Deporte ¿una errata curiosa o
humor coreano? La cuestión es que pasar de una manera a otro perjudica a la
dirección, la suspensión, el cambio y la contestación del acelerador. Esto en
teoría, pues en la práctica solo se ven pequeñas diferencias en los 2
últimos factores.
Como imaginarás, un colosal automóvil de 2.055 kg de peso con
un motor de 3,8 litros no gasta poco. Yendo a un ritmo incesante de 120 km/h en
carretera el consumo de comburente se situó en 9,5 l/ 100 km según el
computador de abordo. Desde aquí, cuanto quieras. Mezclando carretera a
distintas ritmos y algún pequeño paseo urbano la cifra superó los 14
l/100. Realizando solo localidad, mejor no preguntes.

La instrumentación tiene un display TFT de 7 pulgadas
Conclusiones
Debo admitir que el Hyundai Genesis me sorprendió. En el momento en que
un desarrollador generalista eleva sus miras acostumbra pecar de inexperiencia pero no
ocurrió de este modo con el sedán coreano. Es bueno, realmente bueno en todos y cada uno de los sentidos sabiendo el
precio de venta. Bastante vehículo por 67.850 euros.
¿Sobrepasa a sus oponentes de fabricantes premium? Por supuesto el
Genesis tiene poco que envidiar y es una compra mucho más racional. Proporciona enormes
dosis de mucho lujo, habitabilidad y equipamiento a un precio muy sensato. Sin
embargo, el buque insignia de Hyundai tiene un hándicap abstracto y también
intangible: el poder de representación.

En este segmento resulta fundamental el pedigrí de la
marca y en eso los desarrolladores alemanes parten con virtud frente a los primeros
pasos de Hyundai en esta liga. De esta manera, no semeja posible que el Genesis sea la
decisión de los enormes hombres de negocios que asisten a pomposos acontecimientos con
sus suntuosas y habituales berlinas. Cuestión de imagen. Postureo, si deseas llamarlo de este modo.
Sí puede ser una aceptable opción para familias de
prominente poder de compra que procuren un vehículo de alto rango amplísimo, con un
equipamiento terminado y aspecto sutil para viajar con pleno confort. Además de esto, en cierta forma tiene un toque único puesto que Hyundai solo tienen sosprechado vender 25 entidades
cada un año en España siendo los mercados coreano y estadounidense los que
manifestarán una mayor demanda.