Proseguimos examinando modelos de las mejores fabricantes
2 modelos que semejan diferentes pero que no lo son. Opel Corsa y Peugeot 208 estrechan nudos y unen sus fuerzas para competir en el segmento de los utilitarios. Pese a sus similitudes, ¿alguno va a salir ganador? No te quedes con la duda.
El planeta del automóvil de el día de hoy se apoya en sinergias, ayudas y colaboraciones. Los enormes conglomerados son el pan nuestro de cada día, y realizar la guerra a solas cada vez es más difícil. De ahí que varios modelos que antes eran oponentes en este momento son hermanos. Ese es la situacion de los 2 personajes principales de esta comparativa. El Peugeot 208 y el Opel Corsa. 2 utilitarios absolutamente renovados que distribuyen prácticamente todo. Pese a ello brotan inquietudes, ¿hay diferencias visibles? ¿Alguno va a ser mejor que el otro? Averigüémoslo.
Hasta hace un año el Corsa y el 208 eran contrincantes naturales, pero desde el instante en que Opel pasó a ser parte del Conjunto PSA, son modelos hermanados. Hijos de distinto padre, pero de misma madre que, si bien no lo parezca, quieren captar clientes del servicio distintas. Al paso que Opel apuesta por sugerir una forma de pensar germánica, con formatos y costos mucho más conservadores, Peugeot apuesta por prestar un toque diferente y dirigirse a un cliente mucho más audaz, mucho más tecnológico y asimismo con mayor poder de compra, por el hecho de que esos datos distintas pasan factura, jamás explicado de otra forma.
Hablamos de 2 modelos históricos en el segmento de los utilitarios. Los dos nacieron con solamente un año de diferencia. El mucho más viejo de los 2 es el Corsa, nativo de el año 1982. El Peugeot es solamente un año mucho más joven, si bien en 1983 lo conocimos como Peugeot 205. O sea que los 2 amontonan 4 décadas de experiencia y, si bien en la actualidad tienen varios oponentes en frente sí, prosiguen siendo referentes en el segmento. Modelos como el SEAT Ibiza, el Ford Celebración, el Renault Clio, el Volkswagen Polo, o los mucho más modernos Hyundai i20 o Kia Rio, son oponentes que no les pondrán nada simple las cosas a estos 2.
Que no te engañe la visión, si bien simulen distintas, los 2 se apoyan sobre exactamente la misma interfaz, bajo la piel charlamos prácticamente del mismo turismo, pero no cabe duda de que cada uno de ellos ha buscado hacer un diseño diferente. El mucho más audaz es el Peugeot 208, si bien con este acabado Allure, pintura blanca y llanta de 16 pulgadas de la unidad de pruebas no lo parezca. El Corsa es mucho más neutro en su diseño, pero así como lo está la unidad cedida es mucho más vistoso. Acabado Elegance, pintura naranja cuántico y techo en contraste con llanta de 17 pulgadas.

El inconveniente del 208 es que hay que irse a los packs mucho más costosos para tener algo nuevo, algo que en el Opel Corsa no pasa. Ayuda como un ejemplo la pintura de carrocería de 2 colores. Opel lo proporciona como opción desde el acabado intermedio y con un coste de 500 euros. En el 208 solo es viable escogerlo como opción, pagando 300 euros, pero en el acabado GT Line, el mucho más prominente de todos. Si nos rascamos el bolsillo la imagen del 208 es considerablemente más interesante, no hay dudas, con datos únicos y también atrayentes como los pasos de rueda remarcados con plásticos negros.
Interiores de novedosa generación
De puertas para dentro los entornos asimismo son muy dispares. Opel apuesta por prestar un habitáculo mucho más clásico, con un esquema más habitual. Contamos un puesto de conducción con un cuadro de instrumentos insertado en el salpicadero, que puede ser digital con panel de 7″, y después poseemos una consola central con una presentación muy corriente. Si bien la pantalla sea táctil, el Corsa no suprime todos y cada uno de los botones físicos, y deja la climatización en un módulo aparte, algo que valoro pues de este modo no nos ordena a trabajar sobre la pantalla y a distraernos de la conducción. Si bien aquí sí que reconozco que el panel podrían haberlo puesto aun mucho más arriba para una mayor seguridad.

Si brincamos al 208 instantaneamente se siente otro ámbito, uno considerablemente más moderno. No posee nada que ver ni con el Opel ni con algún otro modelo de la rivalidad. Primero, contamos un cuadro de instrumentos que sale del salpicadero y que puede ser absolutamente digital y con efecto 3D, muy chulo. Y la pantalla del infotainment en vez de estar engastada como en el Corsa está anclada únicamente por la base. A propósito, que las pantallas 2 proponen exactamente los mismos tamaños tanto de serie, siete pulgadas, hasta un máximo de 10 pulgadas.
El inconveniente es que los franceses han estirado mucho más de la cuenta la filosofía del minimalismo y decidieron eliminar del mapa la mayor parte de los botones físicos del interior, incluyendo los de la climatización. Esto piensa un inconveniente pues nos ordena a estar todo el tiempo manipulando la pantalla, y como ya conoces, en marcha puede ser difícil y arriesgado en tanto que prestamos mucho más atención a la pantalla que a la carretera. Eso sí, en su favor he de admitir que por lo menos la pantalla está lo mucho más arriba viable.
Los 2 modelos dieron un salto cualitativo en lo que a calidades tiene relación. Los 2 muestran materiales mejores a la media del segmento, si bien hay que admitir que el 208 da un ámbito algo mejor pero con un puesto de conducción mucho más extraño. Tampoco lo hay en lo que se refiere a equipamiento. Los 2 proponen exactamente la misma tecnología, si bien presentada de una manera diferente. Entre los elementos se puede destacar la existencia de faros de LED, cuadro de instrumentos digital, conectividad para gadgets móviles inteligentes, tomas USB, cargador por inducción, ingreso y arranque sin llave, cámara posterior y techo del sol. Además de esto, evidentemente, de una extendida lista ayudas a la conducción y ayudantes, varios de ellos de serie.
Los 2 tienen la posibilidad de prestar lo mismo si tiramos de lista de opcionales, pero de serie hay que confesar que el nivel de equipamiento del Corsa es un tanto mejor. Si examinamos qué proporciona cada uno de ellos observamos que el Opel apuesta por dar unos cuantos datos plus en su acabado básico, que son el asistente de arranque en atentos y el volante multifunción. Aparte de enseñar un tanto mucho más lo realiza con un precio de partida menor como en este momento observaremos. Al límite de sus habilidades el Corsa asimismo se afirma ganador, si bien por poco, gracias más que nada a la existencia de faros matriciales de LED y a un taburete del conductor de ajuste eléctrico con masaje.
Como los 2 tienen exactamente la misma interfaz, los 2 tienen exactamente la misma distancia entre ejes, 2,54 metros.
Eso significa que los 2 deberían prestar exactamente el mismo espacio interior, pero ¿va a ser verdad? La contestación es sí. Con el metro en la mano los 2 lanzan exactamente las mismas cotas de habitabilidad. Eso nos deja con filas traseras donde el espacio para las piernas es con limite. Usuarios de sobra de metro ochenta tienen la posibilidad de pasar apuros asimismo con la altura. A la carencia de espacio se aúna la carencia de datos, no hay no salidas de ventilación, si bien sí hay 2 tomas USB. Asimismo hay anclajes ISOFIX en las plazas laterales para lograr disponer 2 sillas infantiles.
Si nos movemos a los maleteros tampoco hay diferencia alguna. Los 2 cubican exactamente el mismo espacio mínimo, 309 litros. E inclusive la manera de la boca de carga es exactamente la misma, con lo que aquí tampoco hay ganador absoluto. A propósito, los dos maleteros se estiran hasta los 1.106 litros de aptitud máxima, que se consiguen al derrumbar la segunda fila de asientos en una proporción 60:40.

Misma interfaz, misma tecnología, mismas medidas y asimismo, mismos motores. La oferta mecánica del Corsa y el 208 es exactamente la misma. Y en un caso así probaré la que probablemente, sea la opción mucho más deseada y elegida por los usuarios. Peugeot la llama PureTech de 100 caballos, al paso que Opel tiene relación a ella como 1.2 T de 100 caballos. A fin de que no haya diferencias los 2 pertrechan el cambio automático de ocho velocidades que manda la fuerza del motor de forma exclusiva a las ruedas delanteras.
Al volante, diferencias mínimas
Si todo el tiempo he dicho que el Corsa y el 208 son de todos modos exactamente el mismo turismo, uno no puede aguardar que en el momento de ponerse tras el volante los 2 solamente se diferencien. En verdad, si te tapan los ojos no tienes idea realmente bien en cuál te hallas. Muchas, prácticamente todas, son las semejanzas, conque vamos con ellas primero para entonces procurar saber qué pequeños datos los apartan y qué puntos podrían mejorarse, que como pasa siempre y en todo momento, algo hay.

Los 2 forman parte al segmento B y por consiguiente son especiales para ámbitos cerrados o para desplazamientos de corta o media distancia. No obstante, como en los últimos tiempos crecieron en tamaño, modelos como el Corsa o el 208 tienen la posibilidad de postularse como elecciones muy ejecutables para largos recorridos. Son turismos considerablemente más maduros, mucho más evolucionados, y eso se aprecia primordialmente en la excelente calidad de rodadura que los dos emiten. Por el momento no juegan el papel único de segundo vehículo familiar.
La capacidad en un caso así, 100 caballos para los dos, es la adecuada y la perfecta. Yo en lo personal, no sugiero ninguna otra solución mecánica, salvo que hayamos ido a llevar a cabo varios una cantidad enorme de km todos los años, que en un caso así sí sugiero el diésel. Los cien caballos cunden una barbaridad, e inclusive semeja que tienen mucho más caballería de la homologada. No tienen ningún inconveniente en maniobras complejas como salir desde parado o en fuertes recuperaciones. Adelantamientos en vía secundarias o entradas a vías veloces no son instantes críticos. De esta manera por ese lado la solvencia está garantizada.
Siempre y en todo momento apuesto por el cambio automático. La caja EAT8 es una fabulosa apuesta para aumentar la tranquilidad sin achicar posibilidades o subir consumos. Para mí es la apuesta ganadora. Es cierto que piensa un aumento de precio, pero con el tiempo las ventajas sobrepasan precisamente a los problemas. Si bien el cambio es algo retardado y no singularmente refinado, todavía es mejor que la opción de transmisión manual. He tenido ocasión de probarlo en otros modelos y no he quedado satisfecho, conque de nuevo, mi apuesta se decanta por el cambio automático.
Asimismo me ha dado gusto bastante el deber de confort que entregan. Si bien Opel y Peugeot tienen un pedigrí de carreras esencial con los modelos GSi y GTi, ninguna de las opciones que nos ocupa proporciona un prominente accionar dinámico. Son turismos subviradores, y eso no piensa ningún inconveniente. El grupo de suspensiones apuesta primero por la tranquilidad, como ha de ser, dejando en un chato distanciado el aspecto dinámico. Nada que criticar aquí, pero era algo que deseaba nombrar. Si estas buscando un utilitario con mejor conducción tienes que dirigirte al Celebración o al Ibiza.

No hubo enormes sorpresas en lo que se refiere a consumos. Los motores tricilíndricos tienen un problema: su gasto es muy sensible a la conducción. El consumo final tendrá dependencia bastante de lo sensible que seamos. Si nos adelantamos a las condiciones de la circulación y somos cautos con el gas, vamos a rondar en consumos aun bajo los cinco litros a los 100 km. Si por contra somos beligerantes y nos encontramos en terrenos duros para el ahorro, como la localidad, no es nada extraño subir el consumo medio sobre los ocho litros. Un abanico amplísimo.
A lo largo de la semana de prueba con las dos entidades, mezclando distintas entornos el consumo medio de los dos modelos ha fluctuado entre los 4,8 y los 8,2 litros. Son extremos, lo habitual es circular entre los 6 y los 7 litros de media cada 100 km. Asimismo hay que decir que los 2 sugieren distintos métodos de conducción: Eco, Habitual y Sport. Las diferencias entre ellos son casi mínimas, solo afectan a la sensibilidad del pedal del acelerador y la agilidad del cambio. Por ende, tenemos la posibilidad de circular prácticamente en todo momento en los métodos mucho más eficaces para procurar rasguñar alguna décima al consumo.
Una cosa que no me ha dado gusto es la carencia de refinamiento en frío. Los motores tricilíndricos son, por definición, motores inestables y propensos a las vibraciones. Si bien han evolucionado bien, prosiguen siendo menos refinados que bloques mayores. En frío, el 208 y el Corsa tiene una destacable y marcada vibración. Hasta el momento en que el motor no entra en temperatura resulta algo molesto, mucho más si ponemos la marcha atrás. En una fría mañana de invierno el efecto se puede agudizar. La caja de cambios asimismo adolece este inconveniente dando tirones a baja agilidad, algo que hemos sentido en otros modelos del mercado con la combinación de motor tricilíndrico y caja de cambios automática.
Bueno, estas ahora las semejanzas es hora de contarte las mínimas diferencias entre uno y otro. Lo primero es que he sentido al 208 un tanto, un pelín, mejor apartado. La cabina del Peugeot está mejor incomunicada del exterior y por ende la calidad de rodadura es algo mejor. Es esencial aclarar que el 208 de pruebas montaba llanta de 16 pulgadas por las 17 del Corsa, conque una mínima ganancia viene por ese lado. Pero asimismo se aprecia en una menor proporción de ruidos aerodinámicos o mecánicos. Diferencia mínima, repito.

Asimismo he sentido que el Corsa tiene un tacto levemente mucho más dinámico. La suspensión tiene un tarado sensiblemente mucho más duro, y con una dirección mucho más pesada. En este último punto hay que contextualizar que la dirección del 208 está tan asistida que es casi indiferente (en ocasiones no tienes idea ni para dónde señalan las ruedas), conque a nada que Opel haya reforzado el tacto del volante se traduce en una optimización de la conducción. Aun de esta manera, insisto en que ninguno de los 2 puede llevar a cabo honor a las iniciales deportivas de las dos viviendas.
Antes de las votaciones finales hay que investigar un tema esencial y que puede finalizar de desnivelar la balanza a un lado o a otro, quiero decir que los costes, claro. Si nos marchamos a los configuradores de cada uno observamos como el mucho más económico es el Opel Corsa con un precio de salida de 13.050 euros introduciendo descuentos, al paso que el Peugeot 208 una parte de los 13.850 euros. El beneficio prosigue estando ahí en todos y cada uno de los escenarios y opciones probables, con el beneficio que el Corsa puede llegar a tener faros matriciales de LED y taburete del conductor eléctrico con función masaje, cosa que el Peugeot no.
Y el ganador es…
Tras haber sometido a examen a estos 2 utilitarios mellizos, queda mucho más claro que hablamos de exactamente los mismos turismos pero con distintas puntos. Las diferencias son casi mínimas, pero desde mi criterio el Corsa sale ganador por un equipamiento de serie un tanto mejor, un precio de partida algo menor y por el hecho de que no nos pide irnos a los escenarios de equipamiento y diseño mucho más altos y costosos para lograr gozar de lo mismo. Si bien asimismo he de admitir que es mucho más sobrio tanto por la parte interior como por fuera. En eso sí que gana el Peugeot sobradamente.
¿Alguien más piensa que el diseño del Peugeot 208 es más llamativo que el del Opel Corsa? 🤔 #DebateDelDía
¡Vaya duelo de titanes! ¿Cuál eliges, Opel Corsa o Peugeot 208? ¡Yo me quedo con el Corsa, tiene más personalidad! ¿Y tú?
¡Vaya duelo de titanes! Entre el Opel Corsa y el Peugeot 208, ¿cuál te conquista más? 🚗💥
Sin duda alguna, el Peugeot 208 se lleva mi corazón. Su diseño elegante y moderno, junto con su tecnología avanzada, lo convierten en un verdadero ganador. ¡No hay comparación! 💪💙